A los 21 años trabajaba como vendedor mayorista y parte de mi trabajo incluía la comercialización de un producto novedoso y exclusivo en Centroamérica.
En mi búsqueda de nuevos territorios me fue asignado el país de Honduras. En mi segundo viaje a la ciudad De San Pedro Sula, yo ya contaba con un cliente, con quien cerré mi primer y gran negocio en esa ciudad. Este señor se convirtió en mi amigo, Mario René López.
Estaba autorizado para vender al crédito y para asesorar al cliente en cómo incrementar las ventas y abrir nuevas rutas de distribución. Me sentía seguro y determinado a qué ese segundo viaje sería aún más fructífero.
Me reuní con otro cliente potencial, de nombre Max, quien ya tenía referencias mías. Tuvimos una Ese reunion larga, en la que exponía con gran elocuencia, todos mis productos y servicios. Estaba seguro de que este sería otro gran negocio. Lamentablemente, no fue así.
Ese día me fui muy confundido al hotel y tratar de descanzar. La cabeza no paraba de darme vueltas pensando, ¿qué fue lo que hice mal? y me decía a mi mismo todo esto era mi culpa, debía de arreglar esa situación y cerrar un negocio. Así que llamé a mi jefe y le puse al corriente de lo sucedido. Él me recomendó leer un libro, “Cómo ganar amigos e influir en las personas”, de Dale Carnegie. Lo leí. Aún después de leerlo no logré cerrar el negocio tan anhelado con don Max.
Con esfuerzo logré llegar a mi meta de ventas en esa oportunidad, pero llevaba el sentimiento de insatisfacción.
En el 2017, cuando me certifiqué como Coach de Fortalezas Gallup, entendí que el área de venta sin conexión genuina con el cliente es difícil para mí, ganarme a las personas es fácil, vender un producto es difícil, trataba de vender como mi jefe me enseñó y mi jefe vendía muy bien el producto. Logré entender que para generar esas conexiones lo hago por medio de aprender y agregar valor a las personas. Mis talentos son otros y la forma en que los aplico es diferente a la forma en que otros lo hacen, ¡mi forma de vender es única!
Muchas personas buscan "arreglar" sus debilidades, yo he descubierto que lo que debo hacer lo contrario con las debilidades, y es administrarlas y fortalecer mis talentos.
Por medio de CliftonStrengths he logrado hacer esto y cada vez alcanzo ser mucho mejor en mis negocios y relaciones, pues lo hago desde mi "zona de talentos" y no desde lo que me produce estrés.
¿Cómo lideras?, ¿cómo influencias a tu equipo o cómo emprendes? Cada uno tiene una de esas respuestas tienen una respuesta única y de gran potencial. En mi vida he alcanzado muchos logros y he tenido éxitos importantes, pero nunca había logrado ver todo mi potencial, hasta que encontré y conocí mis Talentos Gallup.
Creo que todo equipo y su líder deben conocer sus talentos y encontrar cómo transformarlos en fortalezas, para eso necesitas un coach certificado en Fortalezas Gallup.
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No hay medallista olímpico sin un Coach, y los mejores en cualquier área, se enfocan en lo que hace bien y buscan desarrollar lo que hace bien su alumno, supervisado o cliente, pues es la única forma de llegar al podium de medallistas en la vida y el trabajo.
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No te preocupes, tú información es más confidencial que la de la NASA.
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